domingo, 17 de agosto de 2014

Más Leyendas que nunca (Leyendas del Rock 2014, Miércoles y Jueves, 6 y 7 de Agosto del 2014, Villena, Alicante)

El miércoles, víspera de uno de los acontecimientos más esperados de todo el año, el Leyendas del Rock 2014, fue un día realmente loco, complicado y estresante. Son las cosas que tienen las preparaciones de última hora, el relax de los días anteriores y ver que se nos echaba encima tan importante cita prácticamente en unas horas. Y es que es un error dejarlo todo para los últimos momentos. También la enorme cantidad de gente que conozco que acudió a la cita me hizo ir detrás del móvil gran parte del día, quedando y apuntando mentalmente la hora de llegada de todo el mundo. Y es que a veces pienso que me complico demasiado con estas cosas. De todas formas, no fueron factores personales, sino externos, los que hicieron de este día uno de los más desquiciantes de todos. De primeras, como era de esperar, voy a comentar la jugarreta que nos hicieron a todos la organización del propio festival, aunque sé que esto va a levantar ampollas y crear polémica, pero todos tenemos una opinión que es perfectamente respetable y yo voy a dar la mía. Una de las mejores noticias que nos dio el festival antes de su comienzo fue la inclusión en el camping de una gran zona de sombra, con grandes toldos que ocuparían 2500 m2 del terreno. No lo voy a negar, fue una inmensa alegría, ya que el calor y la calidad de la zona de acampada son sin duda los principales lastres de los últimos Leyendas del Rock.

Pues bien. Hora de apertura la zona, las 17:00 de la tarde. A las 12:00 del mediodía, y además en plan “gracioso”, se publica en el Facebook del festival que han abierto antes de hora, por lo que entre indignados y nerviosos, cogimos el coche y levantando el asfalto llegamos a Villena para descubrir la triste realidad ya casi esperada: la zona de sombra estaba totalmente petada. Nuestra rabia e indignación subió de grado, y según la organización: “hubo gente que llegó antes y no íbamos a rociarlos con napalm”. Me parece una explicación de lo más lamentable. Aquí, como en cualquier otro festival o evento, si alguien llega antes es SU PROBLEMA. O se busca hotel, o duerme a la sombra, pero hay un principio que se llama el de igualdad de oportunidades que extrapolado a este festival se lo pasaron por el forro de los cojones. Pero claro, ante las respuestas que obtuvimos al quejarnos, mejor no continuar discutiendo, porque no valía ni la pena. Y si nosotros nos sentimos jodidos, imaginad la gente que vino desde la otra punta de España habiendo programado sus billetes expresamente para la hora de apertura real y encontrar que el camping estaba lleno solo porque a la organización se le antojó hacerlo antes. Y repito, no es cuestión de solidaridad, ni de egoísmo, ni de hostias, es cuestión de cumplir lo que se dice, porque si no, el año que viene me pienso presentar allí una semana antes de que abran, y me tendrán que dejar entrar porque así lo hicieron este año. Ahora que ya he sacado todo lo que llevaba dentro (que alivio, lo necesitaba…) me dan igual las críticas que se me hagan, solo he expresado lo que pienso yo y la gran mayoría de asistentes, que pudiendo haber cogido una pequeña parte de sombra, se tuvieron que pasar todo el festival comiéndose un sol rico rico rico y sin fundamento. Y que conste que yo mismo llegué a coger algo de sombra, pero creo que sería injusto no quejarse igualmente por toda la gente que piensa igual y que no pudo.

Una vez apalancada la tienda, volvimos al pueblo y el día continuó con normalidad hasta aproximadamente las 5 de la tarde, cuando volvimos a hacer un viaje esta vez para recibir a tantos colegas que venían desde tan lejos, aunque la verdad es que estaba un poco cansado, por lo que la mejor opción fue tomarme el resto del día de relax, comiendo caliente y durmiendo en cama, que ya al día siguiente, empezaba lo bueno.

JUEVES

Por suerte y a pesar de todo, el miércoles fue un día muy distinto al del año pasado. Y tenía claro que no pensaba repetir los errores que cometí en Leyendas 2013. En vez de tomárnoslo a piñón y beber hasta caer de rodillas, dejamos esta tarea para el jueves, que es el primer día del Leyendas como tal, pero sin pasarse, que al fin y al cabo pese a ser el día gratis y que predominaban las bandas tributo, todas ellas comprimidas en un solo día, había mucho interés en ciertos grupos, como In Extremo, aunque he de reconocer que tuve que tragar mucha morralla jejeje. Sin embargo, la mayor sorpresa de aquel día no vino a cargo de estos, ni siquiera del esperado tributo a Rainbow (que desgraciadamente, por culpa de las horas a las que les pusieron, tuve que suprimir de mi agenda).

Hubo una banda gallega llamada Display of Power que, como por su título ya se puede imaginar más de uno, rendían tributo a una de las bandas más importantes y salvajes de la historia del Metal, le pese a quien le pese, Pantera. Y seamos sinceros, es realmente jodido encontrar un tributo a pantera entre el aluvión de este tipo de bandas que año tras año se presentan en los festivales nacionales. Lo es principalmente por el nivel técnico que han de tener todos sus músicos para interpretar los temas dignamente. Emular a Dimebag “Diamond” Darrell es toda una odisea, tanto como al resto de integrantes. Pero ellos lo hicieron tremendamente bien, conquistaron a un público quizá escéptico y su hora fue una de las más intensas de todo el festival. Como en cualquier tributo de bandas grandes, siempre faltan temas, ya que no suelen tocar mucho tiempo, pero creo que supieron hacer una grandísima selección de los temas más potentes y conocidos de Pantera y sobre todo los llevaron a escena con un talento fuera de toda duda, empezando, tras la intro con Suicide Note Pt. I, con la frenética Strength Beyond Strength, con la que empezaron a calentar los humos. No fue la primera banda de la tarde, pero sí la primera que vimos nosotros, y además especialmente motivados. El ambiente fue creciendo poco a poco con New Level, 5 Minutes Alone y sobre todo, Heresy del Cowboys from Hell. Los agudos de Phil Anselmo en este disco fueron los más difíciles de representar por su vocalista. Su guitarrista Roi Gil demostró las pelotas y la habilidad necesaria para emular a Dimebag, y en la mayor parte de los temas, clavó los temas, el sonido de la guitarra, incluso posturas y gestos de este Dios de la guitarra, incluso lució un modelo de guitarra casi idéntico. Las partes que más se diferenciaron de las originales quizá fueron las de batería, aunque esto no quiere decir que hiciese un mal trabajo, sonó contundente y con muchos detalles, pero también se saltó otros. En cualquier caso, ninguna crítica negativa hacia estos chicos, que por derecho propio se harán un nombre dentro del mundillo de este tipo de bandas. No hubo tiempo para baladas ni medios tiempos, prueba de ello fue la intensa marcha uno tras otro de I’m Broken, con todo el mundo dejándose el cuello, pura tralla de la mano de Hostile y Domination (incluído el breakdown final, acojonante) y la conocidísima Cowboys from Hell. Brutales y MUY recomendables, se nota que ya llevan 12 años rindiendo tributo.

Algunas bandas como Motorhits y Onlyrica me las salté por desconocimiento o falta de interés. Cierto es que de los primeros he escuchado buenas críticas y algún retazo de su directo en el reciente Rock Fest Barcelona, y no voy a negar que al menos en lo referente a la voz suenan muy similares a la banda a la que rinden tributo. De todas formas, como ya digo, no soy demasiado amigo de esta clase de bandas, por lo que el jueves fue un día más bien para disfrutar de amigos y unos cuantos cubatas refrescantes, aunque sin llegar a los límites etílicos del 2013, como ya dije antes jejeje.

La Leñera también se cayó de mi cartel personalizado por motivos similares a los anteriores, aunque sé de buena tinta que tienen una buena actuación. Sin embargo, tuve que acudir a ciertos grupos que no entraban en el susodicho horario. Lo cierto es que a veces hay que cumplir con todo el mundo, pero a mí este tipo de bandas no me hace ninguna gracia, de hecho, prefiero mil veces las bandas tributo, son temas copiados, pero al menos son buenos. Y es que entiendo que le quisieran dar un toque de humor al festival el día gratis, pero juntar a tres bandas que son una parodia de si mismos en un solo día me parece excesivo, aunque claro, al que no le gusten que no vaya a verlas. Por supuesto, hablo de Mojinos Escozios, El Reno Renardo y ese delirante esperpento llamado Mambo Kurt. Ya me podéis vapulear de nuevo, se abre la veda. NO, no tengo sentido del humor para la música que amo. O mejor dicho, tengo el justito. Lo siento, no me gustan esta clase de parodias. No me hacen gracia. Pero por respeto a la gente a la que sí le gustan, no voy a proferir ningún insulto contra ellas. Simplemente digo que en mi opinión SOBRAN del cartel. ¿El año que viene Gigatron? Yo no apostaría en contra. Obviamente, tampoco voy a entrar a valorar sus actuaciones (al menos me pude saltar la de Mambo Kurt… algo es algo) ya que al no gustarme un pelo ni El Reno Renardo ni los Mojinos, no tengo nada bueno que decir de ellos. Simplemente diré que los primeros incluso llegaron a sacarme alguna sonrisita, probablemente debido en gran parte al alcohol y al ambiente con los colegas (porque sus versiones me parecieron de lo más vulgar y chusquero) y de los segundos que ya estoy hasta el gorro de ellos, debe de ser la quinta vez que les veo y no les aguanto. A favor de estos tengo que decir que al menos son buenos músicos desaprovechando su talento.

No se ni siquiera si tanta cruz mereció la pena para esperar el comienzo de los verdaderos reyes del jueves en cuanto a ilusión personal, In Extremo. De primeras… no me quiero imaginar lo que esta gente pensaría de nuestro rock autóctono, tocando tras los dos grupos de antes. Prefiero pensar que los tomaron como la broma que son. Y en verdad, aunque había muchas ganas, llegamos un poco tarde a su bolo, quizá pasados unos 20 minutos, por lo que nos perdimos el principio del concierto (que para el que le interese, se puede encontrar por Youtube, aunque obviamente no tiene nada que ver). Para mí, esta era la verdadera fiesta del jueves, no a base de chistes con patas, sino a base de ritmos para saltar e instrumentos de lo más juerguista, como es marca de la casa desde sus comienzos. No se puede hablar de ellos como una banda que haya evolucionado mucho, siguen manteniendo esa esencia Folk-festiva de sus primeros discos. Su concierto fue más o menos lo esperado, ganas de saltar y de mover el culo, una gran fiesta con 8 o 9 personas sobre el escenario al mismo tiempo, con instrumentos tan dispares como arpas, mandolinas, zanfoñas y bastante percusión. Algunos de los instrumentos no se escucharon del todo bien, mientras que otros, como las gaitas, saturaban a veces el sonido global. Y desde luego, no ofrecieron, ni de lejos, el espectáculo de veces anteriores que les he visto, también en festivales. Recuerdo fuegos, gigantescos barcos vikingos, cuerdas, velas… En este caso, por no traer, no trajeron ni telón, simplemente tocaron con un fondo negro, y creo que esta gira bien merece algo más de cuidado por los detalles, ya que la banda cumple 20 años de existencia, que no son precisamente pocos. Hubo aquellos a quien se les atragantó un poco el grupo por la similitud de varios de sus temas, pero al fin y al cabo me alegro de volver a verles en una forma envidiable, a pesar de que salvo el cantante (y no como en anteriores ocasiones), el resto de la banda estuvieron un poco sosos en cuanto a empatía con el público. Pero la fiesta la montaron, doy fe de que lo hicieron. ¿Mi momento especial? Sin duda la mágica interpretación de Liam con su inigualable melodía, que te transporta por unos momentos a antiguas tierras del norte.

El jueves fue un día de bastante colegueo, no solo con los que fuimos de Banyeres, sino con gente que solo vino aquel día, como Juanma y Jose, y con alguna que otra vieja amistad que no esperaba encontrarme allí para nada. Lo peor de todo, el horario que le dieron al tributo de Rainbow, Rising. Tiré de lógica para decidir que hacer, y esta me dijo que un concierto a las 3 y media de la madrugada, con todo el cansancio acumulado, lo mal que se duerme la primera noche en la tienda, y la enorme cantidad de bandas que nos esperaban los días siguientes, con la resistencia necesaria para terminar el Leyendas con garantías… no era demasiado buena idea, a pesar de que no voy a negar que me jodió cantidad perdérmelos, más que nada por los propios temas y por el increíble elenco de músicos que forman la banda. Sé que no tengo perdón, pero espero tener pronto otra oportunidad para verles cerca.

Con todo esto, el viernes sería el verdadero comienzo de la épica batalla que siempre representa el Leyendas del Rock.

_|,,| JaviMetal (Is the Law) |,,|_

1 comentario:

  1. Yo no dudo de la buena intención de la organización a la hora de ofrecernos mejoras en un camping que por sí solo es un verdadero desastre, pero me tocó bastante la moral que se alardeara tanto con un tema que después no era lo que se esperaba. Y lo de abrirlo cuando les dio la gana... eso sí que me quemó vivo. Y todavía más las contestaciones, que no eran más que un copia-pega de excusas absurdas.

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