miércoles, 22 de julio de 2009

Metalway 2009 (MetalGUAY, Zaragoza, Sábado 27 de Junio del 2009)

Esta vez el descanso de la tienda no hizo tanto efecto como los anteriores días. Cinco días de festival son bastantes días, y después de haber visto 25 de las bandas del cartel a saco, el cuerpo empieza a pedir clemencia, pero mi mente me pide más y más metal. Así que nada, quinto y último despertar en Zaragoza, con unas birras y unos pitillos, el desayuno de los campeones, para afrontar con fuerzas (o algo parecido) lo que iba a ser, sin duda, el más perfecto de todos los días Metalway, de principio a fin, genial. Elementos había de sobra, buenos colegas, buen tiempo, excelente cartel y por encima de todo y de todos… ManOwaR, mis dioses, mi BANDA de metal desde que empecé a escuchar (y ya hace unos cuaaantos años, que yo era un moquito jeje). Solo por esto ya habría merecido todo, tanto los buenos momentos como las penurias. La verdad es que mi cabeza se mantuvo casi todo el día en su actuación, deseando que llegara el MOMENTO. Pero quieto parao, que todavía quedaban antes muchas y muy buenas bandas, y como siempre, mucha variedad de estilos.

Una pena no haber podido ver a los HolyHell, el grupo apadrinado por el sensei Joey DeMaio, pero invertí ese tiempo en ir de compras. Escuche todo tipo de opiniones sobre su actuación y sobre ellos mismos como banda.

Mi sesión de festival aquel día comenzó con una de las bandas que mas ganas tenia de ver de todo el festival, Candlemass, y me pareció una injusticia tremenda hacerles tocar a esas horas (13:15 del mediodía) y mas sabiendo que es una banda oscura que pega mucho mas de noche, sin el aplastante calor que hizo el Sábado (el día mas caluroso de todo el festival). Nunca ha sido el Doom Metal mi género predilecto, aunque sin dejar nunca de gustarme. A My Dying Bride, les soporto y me gustan lo justo, los primeros discos de Opeth...pse pse, bastante bien, incluso los primeros discos de Black Sabbath me cuestan bastante de entrar. Pero a los Candlemass, les adoro. Es una de esas bandas que me cae en gracia por alguna razón y me hace estar atentos a todo lo que lleve su nombre. De hecho, ya tuve el placer de verles hace bastantes años en Granada, y en aquel momento, con el tenebroso Messiah Marcolin en las tareas vocales, y fue un gran concierto. Por lo tanto, esta vez una de las dudas era si el nuevo vocalista (desde hace ya algún que otro año, en verdad) Robert Lowe sería capaz de transmitirnos la esencia de los mejores temas de la banda, que a buen seguro iban a caer. Empezaron con Emperor Of The Void, no muy popular pero bien ejecutada, todavía éramos muy pocos los que estábamos viendo el concierto, por lo tanto lo pude disfrutar ancho y en primera fila, con mucha presencia del señor líder Leif Edling y también el guitarrista Lasse Johansson, siempre al pie del cañón y vestidos todos ellos de riguroso negro. En esta ocasión y al tener tan solo una horita para tocar, la suerte estuvo de mi lado, y centraron el concierto en mis dos discos favoritos de la banda, el impresionante “Nightfall” y el ultimo y no menos impresionante trabajo, un “Death Magic Doom” que probablemente, sea el mejor disco de metal que he escuchado en lo que va de año. Flipé con Hammer Of Doom, un temazo 100% Doom metal como la copa de un pino, aplastante, machacón, depresivo a mas no poder, cuyos riffs provocaron mas de un dolor de cuello. Y encima, después (o antes, no me acuerdo) meten el If I Ever Die, cambiando de tercio, pura caña rapidita y en la que Robert demostró que no solo posee una voz magnifica, si no que sus dotes teatrales son excelentes. Por otra parte, el setlist del “Nightfall” no pudo ser mas acertado (a no ser que lo hubiesen tocado entero jeje) con At the Gallows End, que me encanto, pero las que de verdad me pusieron los pelos de punta fueron Dark are the Veils of Death y sobre todo Samarithan ¡¡¡¡que subidooon!!!! Por ultimo, Solitude, uno de los temas mas aclamados y cantados por la gente, y una excelente versión del Kill The King de “Rainbow”, que por cierto, estuvo genial comprobar que bien le va la voz de Robert a este tipo de temas. Ojala vuelvan pronto, ¡disfrute como un perro de su actuación!

Una vez que me reuní de nuevo con Juanma, vimos un ratito desde la sombra a los Heavymetaleros Primal Fear. Cuando nos acercamos, el sonido mejoro un poco, pero en ningún momento fue del todo nítido. Sin embargo, cuando ya llevaban un rato repartiendo caña, el ambiente ya estaba caldeado, y merecía la pena adentrarse más todavía. Un Matt Sinner muy querido aquí en España y un Ralph Scheepers cuadradote y en buena forma física y sobre todo vocal, dejo a mas de uno pasmado con sus bestiales agudos y que no paro en todo el concierto, de un lado a otro, sin descuidar la cercanía con sus fans. Pocos rivales tiene este hombre dentro de su estilo, eso es innegable. Sin centrarse del todo en su ultimo álbum, si tocaron unos cuantos temitas, destacando para mi, que no lo conozco todavía, la preciosa balada Fighting the Darkness, que me dejó muy buen sabor de boca a pesar de ser un tema bastante diferente a lo que suelen hacer. Repaso de discos, desde sus primeros hasta los mas recientes, con Devil’s Ground y algún tema más que quizá yo hubiese cambiado por temas mas acordes a mis gustos como por ejemplo, Heart Of A Brave, que espero escucharla algún día en directo. Sin embargo, también hubo temas con doble bombo a saco y tralla sin tregua como Chainbreaker hacia el final o un temazo como Nuclear Fire. Sin embargo, comentar que no todo en el concierto salió a pedir de boca, pues hacia el final ya, empezaron a haber serios problemas con el micro del vocalista, que dejaba de funcionar por momentos, con el consiguiente y entendible cabreo por parte de este, quien tuvo que tomar la decisión de cambiarlo por otro. Aun así, esto no emborronó el resultado final, que fue bastante satisfactorio.

Después, recordé que hoy debía tomar una decisión. Por problemas de horario, finalmente colocaron a los thrashers Destruction en la carpa pequeña, al coincidir con los daneses Pretty Maids. Difícil elección, pero quizá me tira un pelín mas el hard rock que en thrash, y también en ese momento me apetecían mas los Pretty Maids, así que allá fui, y aunque llegue un poco tarde, me perdí pocos clásicos, o al menos eso creo :P. Una banda que ha venido unas cuantas veces ya a festivales españoles, como ellos mismos dijeron, se esta convirtiendo en una tradición, pero que desafortunadamente, tampoco tienen mucho publico en sus actuaciones, como en las dos anteriores veces que les he visto. Se echa en falta este elemento a la hora de corear con más fuerza las canciones, pero siempre cuentan con un buen puñado de fieles fans. Entre esto y la energía por levantar el “graderío” que tiene el siempre simpático Ronnie Atkins, siempre acaban dando un espectáculo bastante bueno. Y de los temas, pues todo clásicos, como la genial y hard rockera We Came To Rock, una de mis favoritas, con la que me incorpore al concierto, la veloz Back To Back o una que me sorprendió gratamente en directo por su fantástica melodía, Rodeo. Seguidamente a esta, cayo un tema que siempre convierte el momento en uno de los mas especiales de cada festival donde van, la genial Please Don’t Leave Me que me parece una de las mejores baladas de la historia del rock, aunque pertenezca a Thin Lizzy en realidad, pero poco a poco la van haciendo mas suya. Una pena que el público no colaborara más cuando Ronnie y Ken Hammer nos invitaban a corear el estribillo. Con uno de sus mayores clásicos, Red Hot and Heavy, dieron el concierto finalizado, que aunque resultó un pelín soso, no se puede negar el esfuerzo de los lideres de la banda por animar a la peña.

Reencuentro con mi amigo Juanma, y retirada momentánea a las gradas, a descansar un poco los pies, desde donde vimos parte de la actuación de los Dark Tranquility, a los que hacia un puñado de años que no veía. Ellos fueron unos de los pioneros, junto a At The Gates y Carcass, en crear lo que hoy esta tan de moda, el death melódico, que tanto éxito ha dado a bandas como Children Of Bodom o Arch Enemy.  Sin embargo, siempre he considerado a Dark Tranquility una banda bastante mas seria y coherente que estas dos ultimas, de hecho, esto se podía observar en la nula presencia de chiquillos entre el publico, cuando en los Children Of Bodom no dabas dos pasos sin encontrarte con uno. Ojo, la culpa de esto es de las bandas, no de los chavales. Pero vamos a lo que realmente interesa, una actuación en la que todos en conjunto lo hicieron muy bien, pese a contar ante ellos con un publico un tanto desmotivado, tal vez por falta de interés, tal vez por cansancio, la cuestión es que estuvo parado, y eso es difícil sobre todo viendo como se desenvuelve sobre las tablas ese figura que es Mikael Stanne, que no puede parar de moverse, lo cual debería haber motivado mas a la peña, o eso, o los grandes temas que tocaron, como la pegadiza y genial ThereIn, en la cual nos adentramos entre el publico para ver el concierto mas de cerca, o Punish My Heaven y la melódica Lethe de su mítico disco “The Gallery”. Decir también que quizá le falto un puntito de volumen a las guitarras, que quedaban algo eclipsadas por la batería, hecho que se noto sobre todo en Punish My Heaven.

La tarde iba ya coqueteando con la noche, era buena hora, y hacia un clima excelente para presenciar la actuación de los portugueses Moonspell, una banda que ya he visto muchas, pero muchas veces en directo, y que siempre me han gustado pero sin despuntar en ningún momento, incluso a veces me han llegado a cansar bastante. Pues bien, esta vez no puedo decir nada de eso, porque me pareció que estuvieron eléctricos, como renovados, contentos de estar en su país vecino, incluso hablando Fernando, el vocalista, en español en ocasiones y presentando cada uno de los temas como Night Eternal (del último álbum), con algunas frases. Tras esta, y algo antes de lo esperado tal vez, llegó su opera magna Opium, muy bien recibida por todos, y seguida de otro temazo de la banda, Scorpion Flower. A estas alturas ya estaba disfrutando bastante del concierto, así que me adentre un poco mas entre la gente para sacar buenas fotos y verlo más de cerca. La banda cuidó detalles en todo momento, Pedro Paixao se encarga en directo de ir alternando dos instrumentos, teclado y guitarra. El telón de fondo, muy guapo. Fernando Ribeiro muy metido en su papel, siniestro y oscuro. La batería, genial. Pero sobre todo, lo que más me gusto, fue el final, con un triplete de ases como Vampiria, Alma Mater y Full Moon Madness… ¡¡hay que ver como botaba la gente en esta última!! Posiblemente, el mejor concierto que he visto de Moonspell.

Y si alguien tiene alguna duda de si los Gotthard triunfaron sobre el escenario, es porque no les ha visto nunca. Tan pronto como dieron el pistoletazo de salida con Master Of Illlusion, levante el culo corriendo y me integré rápidamente entre la peña, no había un segundo que perder. Que mejor que emprender la recta final del festival con toda la alegría y buen rollo que destila esta banda, desde el inconmensurable Steve Lee que desbordó simpatía, al igual que el resto de la banda, especialmente el guitarrista Freddy Scherer con ese sombrero vaquero. Pronto la peña empezó a responder con aplausos y cuernos en alto conforme iban sonando mas temas de su ultimo disco Gone Too Far, The Call o la bonita balada Falling y aunque soy de los que pienso que este trabajo esta un par de puntitos por debajo de su anterior "Lipservice", no hay problema, ya que basaron prácticamente todo su setlist en estos dos discos, saliéndose de la tónica con temazos anteriores como Sister Moon, Top Of The World o la versión del tema setentero-hippie Hush de los Deep Purple, que les queda bordada. Que forma de comerse, de merendarse el escenario. Steve Lee tiene una voz prodigiosa y una simpatía contagiosa que enseguida hace estragos entre el publico. Modula su voz como le da la real gana, tanto en tonos medios como en altos imposibles, y claro, así es muy difícil no conquistar al respetable… ¡¡¡Que VOZ!!! Además, baladitas hubieron las justas, fue un concierto con ritmo, dinámico. Ya para el ultimo tramo (que corto se me hizo, joder) nos dijo que merecíamos un óscar como publico, interpretando The Oscar Goes To You para después darlo todo con dos temas que no podían faltar, Lift You Up, donde la algarabía del publico alcanzó el punto álgido, solo había que mirar los saltos de todos nosotros, como una masa unida. Y como siempre, despedida con Anytime Anywhere, también del “Lipservice”. Otro valor seguro en festivales, impresionante conciertazo.

Es triste pensar que, la que en un tiempo fue mi banda de power metal favorita y una de mis bandas predilectas en general, este yendo por estos derroteros y cayendo cada vez mas bajo. Y ya no hablo de escándalos, deserciones, locura, o ningún tipo de “prensa rosa del rock”. Si hubo una gran decepción aquel día, bueno perdón, aquella noche (porque ya no quedaba nada de luz) esa fue la del concierto de Stratovarius. Modelo e influencia a seguir por muchísimas otras bandas posteriores, tanto su discografía, directos como miembros han ido decayendo a marchas forzadas. Aunque en realidad, fue una decepción un poco esperada ya. Las últimas veces que les vi me parecieron actuaciones muy muy flojas, sustentadas en sus clásicos, pero aun así desaboridas. No puedo hablar mal del cambio Timo Tolkki - Matias Kupiainen, ya que salvo algún fan a muerte de la banda, no creo que nadie se percatara de una notable diferencia entre uno y otro. El setlist… ya fue otro tema. Muchos temas del ultimo disco desentonaron un poco, como Winter Skies, o Higher We Go, aunque el comienzo fue muy bueno y alentador con Hunting High and Low y Speed Of Light (uno de los mejores temas power de todos los tiempos, y mas veloces), poco a poco todo empezó a desmoronarse, por la cruel forma de destrozar estos por parte de Kotipelto, que seamos francos… o las ultimas veces que les he visto ha estado enfermo… o ya no puede cantar agudos. Casi preferiría ver un concierto con temas cantados en tonos medios (como The Kiss Of Judas, que fue de las mas aceptables) que ver como destruye sin piedad grandísimos temas como Eagleheart (de vergüenza, en serio). Al final intentaron salvarse de la quema con un pequeño solo de Jens Johansson que desemboco en uno de mis temas favoritos, Black Diamond, pero una vez mas Timo (que no tengo dudas de que hace lo que buenamente puede) echó por la borda.

Muy poco quedaba ya para “le grand finale” yo ya estaba muy nervioso, y aprisa y corriendo tracé un plan que me permitiría ir al camping, coger víveres y tomar una cerveza rapidita, para luego volver a mitad de concierto de los Immortal y hacerme un buen sitio lo mas cerca de la primera fila. ¡¡Cual fue mi sorpresa al llegar al camping y encontrar allí a muchos de mis colegas alicantinos!! Tras comentar un poco, llegamos a la conclusión de que todos coincidíamos en el plan. ¡¡Seria la primera vez que vería a ManOwaR en las primeras filas acompañado por alguien!! Pero los nervios, lejos de disiparse, iban en aumento, mi cabeza ya estaba totalmente concentrada en la actuación de los reyes del metal y no salía de ahí. Y, aun así, ni por asomo podía imaginarme lo que se me venia encima, toda la emoción y intensidad que estaba imaginando multiplicada por un millón. Cuando estaba pasando la mitad del concierto de Immortal, salimos del camping directos a comernos el mundo, a muerte con las primeras filas, y allí nos plantamos, cerquísima del escenario David, Dani, Sonia y sus colegas, Parra ¡¡y más!!… la mayoría de nosotros habíamos acudido a este festival por ELLOS, por ManOwaR.

Sinceramente, pido disculpas a los que esperaban ver aquí una crónica completa y más elaborada de Immortal, pero en esos momentos no estaba yo como para fijarme en tecnicismos y sutilezas si solo pensaba en que terminaran, y parece que yo no era el único, porque cuando la gente coreaba su nombre, se podían adivinar voces que lo que gritaban era ¡¡ManOwaR!! ¡¡ManOwaR!!. Aparte, no conozco mucho de su discografía, me gustan y tal, pero no sabría decir que temas tocaron. Me pareció un buen concierto, sin más, con fuegos artificiales bastante espectaculares, y un comportamiento de Abbath y compañía bastante sosaina (aunque me sorprendió que cantaran el oeoeoe y todo xD). Todos muy maqueados, muy vestidos para la ocasión. Esta vez, por suerte para ellos y para nosotros, no tuvieron que tocar a pleno sol y con su maquillaje derritiéndose como paso exactamente en la edición 2003 del Metalmania donde les vi por primera vez (Metalmania Mítico, para los amigos). El espectáculo seguía con chispas y fuegos, a la par que el sonido era bueno pero sin pasarse, nada comparable a lo que escucharíamos después. Como he dicho antes, ignoro el setlist que tocaron, pero demostraron sobradamente su valía como músicos, siendo tan solo tres, armaron un buen jaleo / espectáculo.

Conforme podíamos, nos íbamos haciendo mas hueco, pasito a pasito, fila a fila. Y cuando terminaron los blackers, fue nuestra oportunidad de conquistar la tercera fila, y de ahí en adelante, imposible. Afortunadamente, había muchísima gente, pero no se sentía tampoco una aglomeración excesiva y asfixiante, por lo que pudimos esperar mas o menos pacientemente la poco mas de media hora que tardarían los reyes del metal a salir en escena sin sentirnos como sardinas enlatadas. Cada cierto tiempo echaba una mirada hacia atrás y veía como se iba petando el terreno mas y mas, hasta tener prácticamente todo Metalway a nuestras espaldas. El ambiente, inmejorable, seguían los gritos que aclamaban a los dioses. Arriba, el dios Odín preparado para desencadenar la guerra y Thor listo para aporrear el suelo con su martillo y hacer que todo tiemble, todo por medio de sus representantes en la tierra: ManOwaR.

Y creedme, el concierto… merece otra crónica aparte que publicare seguidamente, así que seguid atentos si queréis saber lo que es sentirse, por un par de horas en Valhalla, la tierra de los dioses.


_|,,| JaviMetal (Is The Law) |,,|_

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