Malignant Tumour, los teloneros que también lo fueron en otras fechas, calentaron el ambiente, eso sí, de una forma bastante inesperada y peculiar. Con ese nombre (tela el nombrecito xD) uno espera algo realmente salvaje, cuyo estilo esté acorde a la banda principal. Pero nada más lejos de la realidad. Y creo que como a mí le pasó a toda la peña que nunca les había escuchado y eso que, para sorpresa de muchos, cuentan con 5 discos en su haber. Pues sí, un poco de thrash por aquí, algo de rock sureño por allá (casi ranchero a veces) y curiosamente mucho de bandas como Venom, aunque suene de los más extraño la combinación, hicieron un show de media hora aproximadamente, con temas propios, como Overdose & Overdrive, extraída de su último trabajo y alguna versión si no recuerdo mal. La tónica general fue más o menos constante, sonido distorsionado, ritmos muy rápidos pero sin complicaciones musicales y mucho cachondeo sobre el escenario. También mucho movimiento. El tono de humor se notaba constantemente. El vocalista era algo así como una imitación física (que no vocal) del mismísimo Lemmy, incluyendo el micrófono a 45 grados de su garganta y el sombrero tejano. No me quedó claro si la barba del guitarrista de la derecha era postiza, pero apostaría por que el de la parte izquierda llevaba una peluca bastante cómica y no paraba de hacer malabares con su guitarra, concentrándose poco a la hora de tocar pero dando cierto espectáculo, lo mismo que el resto de componentes. Poco más que resaltar, música para mover el cuerpo sin complicaciones técnicas, para ir animándose poco a poco, con muchas influencias de otras bandas pero, para mi gusto, no demasiada personalidad
Possessed. Aquí las cosas claras. Ya poniéndonos serios y esperando a que empezaran, con bastante retraso, la banda que removió en su día los cimientos del metal en su género, quizá codo con codo con bandas como Pestilence o Death. Había mucha expectación, a pesar de que en la banda tan solo queda el gran Jeff Becerra de la formación original. El resto forman parte tan solo del grupo del 2007 en adelante, es decir, la formación de reunión, alguno de ellos procedente de la banda Sadistic Intent, otra leyenda del género tremendamente infravalorada. Justo como pensaba (o al menos, como deseaba que empezaran) salieron al escenario tras sonar una intro que personalmente me encanta, la de su segundo disco, “Beyond the Gates”. Irrumpieron con The Heretic, el tema que lo sigue, con una fuerza inusitada, pasión sobre las tablas, pero un sonido todavía muy sucio y bastante mal ecualizado, cosa bastante rara, ya que en Rock City todo suele sonar muy bien. Este aspecto fue mejorado poco a poco, ya tras el impacto inicial Seven Churches y la propia Beyond the Gates (curiosamente seguidos los dos temas homónimos de sus dos discos) sonaron bastante mejor, más reconocibles y menos emborronadas. La primera de las dos, especialmente, fue recibida con gran violencia y algarabía por la peña, deseosa de escuchar temas clásicos. Esto no es nada imposible, de hecho, todos sabíamos más o menos por donde iban a ir los tiros, ya que su carrera discográfica terminó con el EP “The Eyes of Horror” en el año 1987, que se dice pronto, si no contamos su demo de 1993 en la que se incluía el tema inédito Human Extermination. A pesar de todo, considero que la selección de temas fue realmente cojonuda. De este citado EP no tardaron en aparecer temas. The Eyes of Horror, que esperaba más tardía, fue una de las siguientes en sonar, y aquí especialmente es donde uno se da cuenta de una realidad: Becerra no escogió aleatoriamente a los músicos que le acompañarían en la reunión. Fue una auténtica locura musical. Desde el batería, puro nervio a la hora de tocar, tenso y agresivo, pasando por el bajo, que reprodujo perfectamente las complicadas líneas de los temas originales. Pero el que en más de una ocasión nos dejó con la boca abierta fue el guitarra principal, Kelly Mclauchlin, que se marcó unos solos de auténtico infarto. Desde las partes melódicas compenetrado con sus compañeros, como en Pentagram o viviendo a piñón fijo cada momento de otros temas más burracos como Burning in Hell, con ese comienzo atronador y demoníaco de guitarra, para empezar a dar cera hasta no dejar títere con cabeza.
Todo un gustazo ver que, aparte de la fiesta que se montó entre la peña, arriba del escenario no estaban precisamente parados. Salvo el bajista, que a pesar de hacer un gran trabajo quedó en un segundo plano escénico, tanto Kelly como el guitarra rítmica, Daniel González se lo pasaban en grande, a pesar de que ciertamente hablamos de temas bastante técnicos que requieren mucha concentración. Por su parte, Jeff es un caso único. Postrado en silla de ruedas por un balazo recibido hace ya 20 años, sigue contra viento y marea dando caña, con una actitud tremenda, unas ganas de repartir candela impresionantes. Su voz sigue conservando la potencia y ese estilo tan putrefacto que le hizo grande, gritos cavernosos y llenos de rabia homicida, luciéndose en todos y cada uno de los temas, como Satan’s Curse, que engordó la lista de temas de su primer y mítico disco, que en realidad fueron las mejor recibidas, a vista de la que se armó en la zona por donde estábamos, empujones, codazos, gente por el suelo… tremendo. Dos grandes sorpresas en el setlist. Por una parte My Belief, que temporalmente dio un respiro de tanta tralla para volver a liarla gorda. En esa misma parte del concierto también, otra de su segundo disco, Seance, tema asesino donde los haya, de lo más bestiajo que han compuesto nunca, con mucha vena thrasher que incita al desmadre absoluto. Curiosamente, tocaron algo llamado The Crimson Spikes, o bien un tema nuevo, o algo que nunca han grabado, o una cover de otra banda, pero resultó ser, concretamente a nivel de batería, de lo mejor que escuché aquella noche. Si alguien tiene más información sobre este tema, que hable ahora o calle para siempre. Prácticamente tocaron entero su “The Eyes of Horror”, la única que no recuerdo es, cosa rara, Swing of the Axe. Mientras que Storm in my Mind pasó algo desapercibida, Confessions puso las cosas en su sitio, con un Becerra que por momentos parecía salirse de su silla de ruedas para venir a gritar en nuestras jetas. Atención ahora: momento de intensidad máxima. Uno de los temas más esperados de la noche, quizá el que más. The Exorcist, introducción de Mike Oldfield incluida, reventó la sala hasta los cimientos con un público enloquecido. Nosotros transmitíamos nuestra inquietud a la banda y ellos nos daban a cambio más caña. Y si, para colmo, prácticamente la empalman con March to Die, uno de los temas más cantados de toda la noche (¿o debería decir berreados?) hablamos de un momento estelar de la noche, impresionante, de esos de sudar hasta la muerte y las cervicales echando chispas. Otro de los recuerdos que me quedan muy vivos es el de toda la sala gritando a pleno pulmón ¡¡¡REVENGE!!! en la también esperada Twisted Minds que cayó casi a última hora. El colofón y broche de oro a la noche era muy previsible, pero no por ello menos deseado. Death Metal, la más coreada de la noche, el tema que supuestamente puso nombre a todo un género musical volvió a servir a los músicos para demostrar que son unas auténticas fieras, pero el premio sin duda se lo lleva el citado guitarra solista, que junto con Jeff y su energía inagotable, acaparó la mayor parte de las miradas de aquellos que siempre quisimos ver esos incomparables solos de los discos tocados en vivo.
Una noche más que valió la pena hasta el último minuto, disfrutando al máximo después de una temporada sin conciertos con un monazo terrible, pero en la que me quité una espina del tamaño de un autobús viendo en vivo a estas auténticas leyendas, además uno de los primeros grupos del género que escuché. Una vez relajados tras la ira descargada en el concierto, en la terraza estaba Jeff Becerra, siempre muy amable, atento y cordial con todo el mundo, haciéndose fotos hasta aburrirse (abajo podéis ver unas con Juanmi y Lobo que están de puta madre), todo un ejemplo a seguir, tanto a nivel de superación como a nivel de trato personal con los fans, a pesar de ser quien es.
PD. Gracias a Juanmi y a Lobo por las fotos.
_|,,| JaviMetal (Is The Law) |,,|_
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si te ha gustado la crónica, estuviste allí o quieres sugerir alguna corrección, ¡comenta!